Cuéntico bóbico para una nénica aburrídica


Una mañánica

de primavérica

hallé una láuchica

en la verédica.

Era muy rárica:

con dos mil rúlicos

sobre la cárica

según calcúlico.

El su cratérica

guardaba heládico

de rica crémica

y chocolático.

Jugó a la abuélica

también al ránguico,

pisa pisuélica

y bailó un tánguico.

Y muy ligérico

se fue en un cárrico

con sus cochérico

y sus caballicos.

No, no es mentírica

-cara de tórtica-

¿No crees nádica?

¡pues no me impórtica!

Estas historias de botellas que viajaron por el camino del agua se pueden encontrar